Según el informe “Generación Z y empleo” publicado por ManpowerGroup, los jóvenes nacidos entre 1996 y 2012 —quienes representarán un tercio de la fuerza laboral mundial en 2030— están transformando profundamente las dinámicas del mercado de trabajo. Sin embargo, sus expectativas chocan con una realidad profesional que no logra cumplirlas.
El estudio revela que el 47 % de los profesionales de la Generación Z se plantea abandonar su puesto de forma voluntaria en los próximos seis meses, y un 34 % teme ser forzado a dejarlo. A esto se suma un bajo nivel de confianza en encontrar otro empleo que cumpla sus aspiraciones.
Propósito, salud mental y formación continua
Más del 80 % de la Generación Z prioriza trabajar en empresas con propósito, que ofrezcan bienestar integral y programas de upskilling y reskilling. El 56 % vive al día y el 52 % sufre altos niveles de estrés, cifras muy superiores a generaciones anteriores. Estos jóvenes exigen entornos laborales más humanos, flexibles y sostenibles, que escuchen sus necesidades y fomenten su desarrollo.
Las empresas comienzan a reaccionar
El 70 % de las organizaciones ya adapta sus políticas para atraer este talento joven: mejoran herramientas tecnológicas (78 %), compensaciones económicas (74 %) y promueven la transparencia en el desarrollo profesional (74 %). Además, muchas apuestan por programas de incorporación como Manpower MyPath o colaboraciones con Junior Achievement, que combinan formación, acompañamiento y crecimiento transversal.
Un cambio estructural hacia 2030
De cara a 2030, se espera que la Generación Z acumule habilidades digitales, híbridas y adaptativas que la posicionan como motor del cambio. Pero su inestabilidad laboral inicial podría generar “cicatrices profesionales” (scarring), afectando su crecimiento si no se toman medidas específicas desde las organizaciones.
Para ManpowerGroup, el reto es claro: adaptar procesos, lenguajes y culturas a esta generación. Escuchar, ofrecer propósito y promover el bienestar serán claves para atraer y retener al talento que liderará el futuro del empleo.