
España no vende, pero lo español sí: el conflicto de marca que debemos resolver
En marketing pocas paradojas resultan tan claras como la que atraviesa la marca España. Mientras la imagen institucional del país sufre un deterioro en la escena internacional, lo español —productos, cultura, gastronomía, diseño y estilo de vida— se encuentra en un momento de auge. El rechazo a la marca país convive con la admiración hacia lo que representa.
Una marca país debilitada
España arrastra una reputación marcada por la inestabilidad política, la polarización social y una gestión institucional que proyecta incertidumbre. Informes como el Nation Brands Index o el Country RepTrak confirman su retroceso en los últimos años. Factores como la fragmentación territorial, los cambios de gobierno, la gestión de crisis y el ruido político restan credibilidad. Esta debilidad no solo afecta al turismo o la inversión extranjera, también limita la proyección de empresas, la atracción de talento y la influencia cultural.
Puedes leer este artículo completo en la edición de pago de PYMES Magazine.
La versión gratuita no incluye la totalidad del contenido, disponible solo en la edición premium.
-
PYMES Magazine Nº92 – Octubre 2025 (Edición Sevilla)
2.00 € -
Ejecutivo
24.00 € -
Empresarial
15.00 €



