Cada vez abundan más los entrenamientos milagrosos para dejarte un cuerpo de infarto, los productos hechizantes que hacen que tu organismo cambie de la noche a la mañana, y ni tú mismo te reconozcas, o incluso la gran variedad de máquinas, muchas de ellas bastante atractivas con esa gama de luces tan hipnótica que nos hacen rascarnos bolsillos. 

Pero ha llegado la moda del masaje para pérdida de grasa, cuando ya es sabido que dicha pérdida se produce cuando una molécula de ácido graso entra en la famosa mitocondria y se oxida. Estamos en un momento donde “todo vale”, y no. Nada de eso es cierto.  Ya es hora de tomar conciencia con lo que hacer.  Ahora más que nunca, nuestro valioso dinero y copiar algo de otras culturas donde “el todo vale, vale, pero argumentando su valía”