
¿Comer bien es caro? Mitos y verdades.
Maru Zafra
Nutricionista en Adaia Nutrición
“Comer sano es muy caro” es una frase que escucho a menudo en consulta y fuera de ella. Entiendo que esta frase hace referencia a productos bio, superalimentos o con las palabras “eco”, “sin” o “light». En realidad comer bien no tiene que afectarte mucho al bolsillo.
Comer bien y mantener hábitos saludables no tiene nada que ver ni con marcas ni con modas. Se basa en una alimentación real a base de frutas, legumbres, verduras, carne, pescado, cereales, huevos… y todo ello está a nuestro alcance. Saber priorizar lo esencial en el carrito de la compra será la mejor inversión.
Por ejemplo, las legumbres. Nutritivas, ricas, económicas y podemos hacer diversos platos con ellas. Con las frutas y verduras, cuando las compramos en temporada, disponemos del mejor sabor y el mejor precio.
Un truco: Planificación en los menús. Partiendo de una lista de ingredientes para un menú semanal planificado, vamos a evitar desperdicios, pues a veces comer sobre la marcha resulta caro y lo que elegimos normalmente no es lo más recomendable.
Para que el menú sea rico y asequible a todos los bolsillos, no necesitas superalimentos de moda que vemos constantemente en Instagram. Solo necesitarás planificar y ser constante para así ir ganando conocimientos sobre los alimentos de temporada y práctica a la hora de cocinar tus platos. Comer bien no tiene porque ser un lujo.
Que no te líen las redes con alimentos top y milagrosos muy subidos de precio y que posiblemente no tengan los beneficios que nos están queriendo vender. Lo accesible para todos está en el comercio local, la pescadería, carnicería o frutería de tu entorno.
Si no sabes por dónde empezar, te doy una pista. Comienza por platos de toda la vida y sencillos. Unas lentejas con verduras, unos macarrones con salsa de tomate, verduras y carne, un pisto, un buen puchero, un aliño con muchos colores, un salmorejo, cualquier pescado al horno o a la plancha… irás controlando poco a poco qué comprar. A la misma vez, dispondrás de más tiempo, más ganas de cocinar y llegará la inspiración e irás consiguiendo platos diferentes y más elaborados.
Si necesitas ayuda para mantener hábitos saludables a largo plazo, con la planificación familiar o individual en tus menús y adaptarlos, no dudes en pedirme ayuda. Estaré encantada de que podamos trabajar juntos.