La imagen corporal, definida como la percepción que una persona tiene de su propio cuerpo, es un aspecto crucial de la salud mental y el bienestar emocional. Como ya sabes todos y todas en la sociedad actual en la que vivimos nos enfrentamos a una presión constante para cumplir con los estándares de belleza poco realistas y alcanzar un cuerpo “perfecto”. Desafortunadamente, los niños y niñas, y especialmente l@s adolescentes, no se libran de esta presión y puede ser especialmente desafiante para ell@s ya que están en la época de su desarrollo en la que están formando su identidad y construyendo su autoestima. En este contexto, l@s progenitores tenemos un papel importantísimo que no podemos descuidar para promover una imagen corporal positiva en nuestr@s hij@s. Algunas estrategias efectivas que podemos poner en práctica para ayudar a que nuestr@s hij@s desarrollen una relación saludable y amorosa con su cuerpo son:
1. Modelar una actitud positiva hacia el propio cuerpo: L@s progenitores somos modelos a seguir para nuestr@s hij@s por lo que si ven que nosotr@s nos sentimos cómod@s y segur@s con nuestros cuerpos, es más probable que internalicen esa actitud positiva. Evitar comentarios negativos sobre el propio cuerpo y enfocarse en cualidades positivas y habilidades puede ayudar a crear un ambiente en el hogar que promueva la aceptación personal.
2. Enseñarles que el valor de una persona no se basa en su apariencia física sino en sus cualidades personales y en su proceder. En lugar de enfocarse únicamente en la apariencia física, elogiar y celebrar las habilidades, logros y cualidades personales y reconocer sus talentos, esfuerzos y contribuciones puede fortalecer su autoestima y enseñarles que su valía, y la de l@s demás, va más allá de su apariencia.
3. Fomentar hábitos y una relación saludable con la comida, como una alimentación balanceada, ejercicio regular y cuidado adecuado del cuerpo, sin enfocarse exclusivamente en el peso o la forma corporal. Promover una relación equilibrada y sin culpa con la comida es fundamental para una imagen corporal positiva.
4. Fomentar la comunicación abierta: crear un ambiente donde l@s hij@s se sientan segur@s para expresar sus sentimientos y preocupaciones sobre su cuerpo. Escuchar activamente y validar las emociones de l@s hij@s es esencial para fortalecer su autoestima y ayudarles a desarrollar una imagen corporal positiva.
5. Educar sobre la diversidad corporal: Es fundamental enseñarles que la belleza es diversa y tiene todas las formas y tamaños. Exponerlos a una variedad de cuerpos en la vida real y en los medios de comunicación puede ayudarles a comprender y apreciar la diversidad corporal y a desafiar los estereotipos de belleza irrealistas.
6. Promover el autocuidado y la autorreflexión: Enseñarles a cuidar su cuerpo de manera compasiva y respetuosa es una parte importante de promover una imagen corporal positiva. Fomentar prácticas de autocuidado como el descanso adecuado, la relajación y el manejo del estrés puede ayudarles a conectar con sus cuerpos de una manera saludable y amorosa.
7. Desafiar y contrarrestar los mensajes negativos de la sociedad y de las redes sociales: Hablarles sobre la manipulación de imágenes en los medios, el marketing dirigido y los estándares de belleza poco realistas para que puedan desarrollar un pensamiento crítico y resistir la presión externa.
En conclusión, las madres y los padres desempeñan un papel esencial en la promoción de una imagen corporal positiva en sus hijos e hijas. Al modelar una actitud positiva hacia el propio cuerpo, enfatizar la salud sobre el aspecto, fomentar la comunicación abierta, educar sobre la diversidad corporal, promover el autocuidado y la autorreflexión, desafiar los mensajes negativos, celebrar las habilidades y logros, y fomentar una relación saludable con la comida, los padres y madres pueden ayudar a sus hijos e hijas a desarrollar una relación amorosa y compasiva con sus cuerpos que perdurará toda la vida.