Con el paso de los años, los usuarios de internet han ido tomando cada vez una mayor conciencia, sobre la importancia de proteger sus datos frente a la captación de los mismos por parte de terceras empresas, que luego lo utilizarán para revenderlos en su propio beneficio, o para “bombardearnos” con ofertas comerciales de sus productos y/o servicios.
Según unos estudios realizados recientemente, el número de cibernautas que se preocupan por su privacidad, por sus datos y rastros digitales, puede estar ya cerca del 10%.
Para este grupo de usuarios celosos de su privacidad, es precisa la existencia y uso de herramientas digitales que les protejan de este comercio de datos, y es aquí donde entra en juego INTERNXT, una startup dedicada a ofrecer servicios en la nube no intrusivos.
Internxt ha lanzado hasta la fecha dos servicios: Internxt Drive, una alternativa a Google Drive y Dropbox, que ofrece un espacio de almacenamiento en la nube, e Internxt Photos, una biblioteca de fotos garantizando dos premisas: proteger la seguridad y privacidad de los usuarios. La primera de estas premisas, la consiguen permitiendo que sean los propios usuarios los que custodien las claves para desencriptar los archivos, de tal manera que ni la propia Internxt tiene acceso a dicha información. La segunda de las premisas es posible, gracias a distribuir la información mediante tecnología blockchain, fragmentándola al inicio del proceso, hacia varios servidores, protegiéndola de este modo de posibles ataques o hackeos.
El tercer gran proyecto de la compañía; que aún se encuentra en desarrollo pero que tiene previsto ver la luz en las próximas fechas, es Internxt Send. En este caso, se trata de una infraestructura que permitirá hospedar sitios web, el desarrollo y pruebas de nuevas aplicaciones web y otros recursos de red de una forma rápida y económica.
Para este servicio, la empresa hará uso de discos duros y procesadores de la red descentralizada para crear de este modo, un mega ordenador que pueda ser utilizado virtualmente por todos los usuarios.
Y es que esta joven compañía tiene claro que su objetivo es plantar cara a los principales players de internet, a través de servicios que garanticen la privacidad y seguridad de los usuarios como valor diferencial.
En palabras de su fundador, Fran Villalba, “internet está a día de hoy controlada por gigantes tecnológicos como Google o Facebook, quienes ofrecen servicios a usuarios que son un medio para un fin, ya que se utilizan para recolectar información de los usuarios para poder perfilarlos mejor, y hacer un uso comercial de los mismos; algo que en Internxt no ocurre porque nuestros servicios son un fin en sí mismos”.
La puesta en marcha de Internxt, comenzó en el año 2020 y cerró el año 2021, con 300.000 usuarios activos y una facturación en torno al millón de euros. Tal ha sido el crecimiento de la compañía, que en la última ronda de inversión, la aceleradora de telefónica se ha unido al proyecto, en el que ya se encontraban otros importantes inversores como Juan Roig, ESADE, The Venture City o Balaji Srinivasan.
La compañía actualmente se encuentra valorada en 40 millones de euros y espera cerrar el 2022 con entre tres y cuatro millones en facturación; algo que parece bastante probable porque sólo en el primer trimestre del presente año, ya ha superado la facturación del año anterior.
Los próximos pasos de Internxt parecen pasar por mejorar su línea de servicios corporativos, donde tienen confianza en encontrar su espacio y ser altamente competitivos, según las palabras del CEO; y proseguir con la mejora de los productos que ofrecen actualmente, así como continuar desarrollando otros nuevos productos que aporten valor añadido al mercado, pero siendo siempre fiel, a la idiosincrasia de la propia compañía.
Veremos qué depara el futuro a esta “Nube española”, lo que está claro es que competir con los servicios en la nube actuales de las grandes compañías, que ya se integran con los principales sistemas operativos y dispositivos, no será tarea fácil.
Todo dependerá de que el crecimiento de la comunidad de usuarios que valoran la seguridad de sus datos, y anteponen su privacidad a las comodidades de una nube integrada, sea cada vez mayor.