El 39% de los directores de Recursos Humanos considera que la inteligencia artificial mejorará el compromiso de los empleados en 2025, según un informe de tendencias de Top Employers Institute. Nicolás André, de Vip District, destaca que la digitalización en los RRHH ya es imprescindible para optimizar la gestión del talento y la comunicación interna.
La adopción de tecnologías digitales en la gestión de Recursos Humanos ha experimentado un notable avance en los últimos años. Departamentos que tradicionalmente no lideraban la implementación de nuevas herramientas, como los de RRHH, ahora recurren a tecnologías avanzadas para gestionar nóminas, reclutamiento, formación y comunicación interna, entre otras funciones.
Nicolás André, Director de Soluciones de RRHH de Vip District, destaca la importancia de este cambio: “La digitalización en la gestión de RRHH es ya imprescindible. Herramientas tecnológicas permiten una comunicación más efectiva entre empresas y empleados, mejorando su compromiso y sentido de pertenencia”.
La inteligencia artificial (IA) se posiciona como un factor clave en este proceso. Según el informe de Top Employers Institute, el 27% de los responsables de RRHH ya la consideran una prioridad estratégica. Además, un 39% de ellos cree que la IA potenciará la relación laboral y el compromiso de los trabajadores, facilitando tareas como la automatización de procesos, el análisis de patrones de rendimiento y la personalización de planes de formación y carrera.
Entre las soluciones de IA desarrolladas por Vip District destacan asistentes para generar contenido de comunicación interna, sistemas para moderar mensajes de empleados y herramientas predictivas que identifican riesgos de abandono laboral o situaciones de estrés. Estas tecnologías también optimizan el reclutamiento mediante la revisión automatizada de currículums y la realización de videoentrevistas.
No obstante, la integración de la IA conlleva riesgos que deben gestionarse adecuadamente. André subraya la necesidad de auditar y ajustar constantemente los algoritmos para evitar sesgos y garantizar que las decisiones sean éticas y transparentes. “Es fundamental alinear estas tecnologías con los valores corporativos para lograr un uso justo y responsable”, concluye.