Cuántos patrones marcados y creencias de que para ser empresario/a, se requiere ser todo el tiempo políticamente correcto, presentar la cara del adulto perfecto y luego te das cuenta de que en muchas ocasiones dejas oculto esa parte de ti que es quien tiene la antorcha del éxito. Tu ser genuino, auténtico y creativo. ¿Puedes ser empresario/a y mantener presente tus encantos de niño/a?
¡Claro que sí! Ser empresario/a y mantener un niño interior sano son perfectamente compatibles e incluso pueden complementarse entre sí.
Aquí hay algunas formas de lograrlo:
Fomenta la creatividad: Mantén viva tu creatividad explorando nuevas ideas, jugando con conceptos innovadores y pensando fuera de la caja en tu negocio. Esto te ayudará a mantener viva la chispa de tu niño interior y a encontrar soluciones originales a los desafíos empresariales.
Cultiva la curiosidad: Sigue siendo curioso y mantente abierto a aprender cosas nuevas en tu campo empresarial y más allá. La curiosidad es una cualidad fundamental de un niño interior sano y puede ayudarte a mantener una mentalidad de crecimiento en tu negocio.
Encuentra alegría en el proceso: Disfruta del viaje empresarial tanto como del destino final. Celebra los logros, aprende de los fracasos y mantén una actitud positiva y optimista en todo momento. Esto te ayudará a mantener viva la alegría y la emoción de tu niño interior mientras construyes tu negocio.
Mantén un equilibrio: Asegúrate de dedicar tiempo tanto al trabajo como al juego. Prioriza actividades que te traigan alegría y te ayuden a recargar energías, ya sea pasando tiempo con amigos y familiares, practicando hobbies o simplemente divirtiéndote.
Acepta y abraza tus emociones: Reconoce y acepta tus emociones, tanto las positivas como las negativas. Permítete experimentar la alegría, la tristeza, el miedo y todas las demás emociones que surjan en tu viaje empresarial. Ser consciente de tus emociones y manejarlas de manera saludable es parte de mantener un niño interior sano.
Sé auténtico: No tengas miedo de ser tú mismo en el mundo empresarial. Permite que tu autenticidad brille a través de tu trabajo y tus interacciones con los demás. Ser fiel a ti mismo es esencial para mantener un niño interior sano y construir un negocio que refleje tus valores y pasiones.
Al integrar estos principios en tu vida empresarial, puedes mantener un equilibrio saludable entre ser un empresario exitoso y mantener viva la alegría y la creatividad de tu niño interior.
Recuerda que en la medida en que reconoces también que te frena para continuar expandiendo, esas creencias que te van limitando, se limitan tus equipos de trabajo y visión de empresa. Esto puede suceder de manera puntual, sin embargo, es importante identificarlo para atravesar la barrera y desde ahí crear nuevas oportunidades sanando aquello que una y otra vez no te permite ser tú mismo/a.
En vez de ser escaparate de que todo va perfecto, reflexiona donde tienes tus fortalezas interiores ahora y cuáles son aquellas acciones que te están limitando, desde una manera honesta cuando haces la distinción, puedes reconocer donde requieres apoyo para continuar tu éxito no sólo como empresario/a, sino también como persona.
Tu sabiduría y el éxito vienen de tu maravilloso ser.