La revisión del IVA, nuevos tributos, el registro horario digital y la adaptación futura a VeriFactu aumentan la complejidad para el 98% del tejido empresarial.
Un 2026 con mayor presión normativa para pymes y autónomos
Las pequeñas y medianas empresas y los trabajadores autónomos se preparan para un 2026 marcado por un incremento de la complejidad fiscal y regulatoria. La entrada en vigor de nuevas obligaciones y la revisión de normativas existentes afectarán de forma directa a la operativa diaria del 98% del tejido empresarial español, según el análisis realizado por expertos de Quantax.
Los cambios previstos incidirán en ámbitos clave como cotizaciones, prestaciones, fiscalidad y cumplimiento normativo, obligando a las empresas a revisar procesos internos y a apoyarse en soluciones tecnológicas para garantizar el cumplimiento de la ley.
Nuevos impuestos, IVA y registro horario digital
Entre las principales novedades destacan la revisión de los regímenes del IVA, la implantación de nuevos impuestos y la obligatoriedad del registro horario digital para los negocios con empleados. Estas medidas supondrán un reto adicional para muchas pymes, especialmente para aquellas con estructuras reducidas y menor capacidad administrativa.
A este escenario se suma el aplazamiento del sistema VeriFactu hasta 2027, una decisión que ha sido recibida como un alivio temporal por parte del sector, aunque no elimina la necesidad de adaptación futura.
VeriFactu: un respiro que no elimina el desafío
Para muchas pymes y autónomos, la implantación inmediata de VeriFactu suponía un proceso complejo y costoso. La prórroga ofrece margen para planificar la transición, pero el reto sigue presente.
Álvaro Pascual, cofundador y CEO de Quantax, señala que “aunque el aplazamiento se ha recibido con alivio, no elimina la necesidad de avanzar hacia sistemas más eficientes y digitales. El desafío continúa, tanto con VeriFactu como con la digitalización en general”.
La digitalización, una necesidad ineludible
La transformación digital se consolida como un requisito imprescindible para operar con garantías en un entorno normativo cambiante. Según el informe Observatorio TeamSystem: radiografía y diagnóstico de pymes, autónomos y asesorías, solo el 8% de las pymes y autónomos había implantado VeriFactu antes de su aplazamiento, lo que evidencia la brecha digital existente.
Quantax insiste en la importancia de contar con herramientas accesibles y adaptadas a la realidad de los pequeños negocios, que permitan mantener el control fiscal y minimizar riesgos ante escenarios regulatorios inestables.
Un año de desafíos, pero también de oportunidades
La compañía prevé que 2026 será un año decisivo, con importantes retos, pero también con oportunidades para que pymes y autónomos avancen en digitalización y refuercen su competitividad. Este colectivo representa el 98% del tejido empresarial y el 50% del empleo en España, según recuerda Unicaja.
Francisco de las Heras, CFO de Quantax, subraya que “en un marco fiscal cada vez más complejo, disponer de sistemas digitales que garanticen un cumplimiento riguroso ya no es una ventaja competitiva, sino una necesidad para evitar sanciones y operar con seguridad”.
