La respuesta a la pregunta es simple: en verano debemos alimentarnos de la misma manera que lo hacemos durante el resto del año.
Además, para alimentarte de forma saludable y adecuada no hace falta que cada día comas cosas diferentes y que estés continuamente innovando en la cocina.
Mucha gente le teme al verano por el hecho de las vacaciones y el salir más pero yo siempre digo, que todo lo contrario, que puede ser una buena época para mejorar tu alimentación. Con el calor apetece comer más ligero y hay una gran variedad de alimentos de temporada que pueden hacer tus platos más vistosos y apetecibles. Además, tenemos más tiempo para ocuparnos de nosotros y mejorar nuestros hábitos de vida.
Aquí no vamos a centrarnos en una lista de alimentos milagrosos, recomendaciones cerradas, el menú ideal para el verano, etc. Simplemente la clave está en ir al más al mercado, y que comprar frutas y verduras de temporada, que además serán más variadas y coloridas que las de invierno.
Aprovecha esas vacaciones para disfrutar, desconectar y hacer cosas diferentes. Anímate así a entrar más en la cocina, buscar recetas fáciles y rápidas de hacer, a planificar y organizar lo que comes. Porque no somos lo que comemos, somos lo que elegimos comer.
Por desgracia, suelen aparecer las ‘creencias’ del tipo “no mezclar esto con aquello” o la demonización hacia ciertos alimentos. Recuerda que los alimentos de verdad no salen en la televisión, no son famosos y los encontrarás en tu mercado más cercano. Comprando de esta manera estarás consumiendo alimentos de proximidad y haciendo que tu alimentación sea, no solo mejor nutricionalmente sino más sostenible con el medio ambiente.