El patinaje es un deporte que divierte y que a la vez tiene muchos beneficios tanto para niños como para adultos. Se considera un deporte aeróbico porque requiere de
ritmos constantes de oxígeno pero también anaeróbico por la necesidad de explosión en un momento dado en las pruebas cortas.
Así, entre los principales beneficios de su práctica tenemos el fortalecimiento de las piernas, mejorando el tono muscular. También, es un deporte donde se queman muchas
calorías. De esta manera, realizando media hora de patinaje, a una velocidad estable y moderada, se pueden quemar hasta 300 calorías.
Por su parte, se consigue una mejora de la resistencia física y se ejercita el equilibrio. Aparte, se fortalecen corazón y pulmones. Además, el patinaje incrementa la coordinación motriz, y modela y fortalece la cintura, el abdomen y los glúteos.
Por otra parte, su práctica activa la circulación sanguínea, y actúa como desestresante natural. Es recomendable a la hora de practicarlo, patinar siempre utilizando casco, rodilleras y coderas y colocarse también muñequeras de plástico rígido para mantener la articulación en su lugar y evitar una posible fractura.