Llevar a cabo una dieta equilibrada te ayudará a sentirte mejor y enfermar menos. Te proponemos algunos consejos y hábitos que puedes introducir en tu dieta para mejorarla. Es fundamental que haya una variedad notable de alimentos, que introduzcas en ella verduras y frutas, que reduzcas las grasas, que moderes las cantidades y que tomes mucho líquido. Algunos trucos en el desayuno por ejemplo son cambiar la leche entera o semidesnatada por leche desnatada y el pan normal cambiarlo por pan integral. Asimismo debes introducir una pieza de fruta.
A media mañana y en la merienda también podrías tomar una pieza de fruta, un zumo de frutas o un bol de cereales muesli con fruta. Los frutos secos también son una idea genial para comer en esta franja horaria, te aportarán energía para continuar el día. Respecto al almuerzo y la cena tienes infinidad de opciones pero te aconsejamos que alternes carne, con verduras, legumbres, pescado, huevos y cereales. Especialmente por la noche deberían ser alimentos más ligeros para favorecer la digestión.