
Retención de líquidos. Alivio desde dentro hacia fuera
Maru Zafra
Ya está aquí: este calor intenso y tan persistente, sobre todo en nuestra amada Sevilla. Y con él llegan las piernas cansadas, la hinchazón y los edemas, principalmente en nuestras piernas.
Lo que comúnmente conocemos como retención de líquidos.
Este fenómeno puede deberse a múltiples factores, pero en esta época se acentúa por el aumento de la temperatura ambiental, que favorece la vasodilatación y dificulta el retorno venoso.
Cuando hay un desequilibrio hídrico, se retiene agua en el espacio intersticial (fuera de las células), lo que puede provocar edema o hinchazón.
El calor no podemos cambiarlo, pero sí podemos sentirnos mucho mejor adoptando hábitos saludables. Sin ellos, el problema puede agravarse, especialmente si llevamos un estilo de vida sedentario. Con este clima, las horas para salir a la calle se reducen, y si no caminamos, nos movemos o hacemos ejercicio, la retención y el estancamiento de líquidos aumentan. Si además te hidratas poco, el cuerpo tenderá a retener aún más agua.
Y atención con la alimentación: mucho ojo con los encurtidos, embutidos, ultraprocesados o comidas con salsas que suelen contener un alto aporte de sodio. Todo esto contribuye a alterar el equilibrio osmótico que regula nuestro cuerpo.
Te voy a dar unas pautas que puedes seguir a lo largo de todo este verano para evitar la retención y “mantenerla raya”. Además, favorecerás la diuresis:
- Incluye alimentos ricos en agua, principalmente frutas como piña, melón, sandía y otras de temporada. Añádelas en ensaladas como primer plato.
- En cuanto a verduras, apuesta por calabacín, apio, pepino… Recuerda que es temporada de gazpachos y salmorejos. ¡Innova! Añade frutas como fresa, sandía o remolacha.
- Incorpora alimentos como espinacas, legumbres, aguacates o plátano. Son ricos en potasio y ayudan a regular el balance de líquidos, contrarrestando el efecto del sodio.
- Muévete. Intenta caminar a primera o última hora del día. Si entrenas en el gimnasio, te ayudará a mantenerte activo y más fresco.
- Si pasas muchas horas sentado o tumbado, intenta elevar las piernas para facilitar el retorno venoso.
- Si notas que la retención o los edemas son excesivos, o sientes dolor, sobre todo en las piernas, consulta con tu médico.
- Respeta tus horas de sueño: el descanso también influye en tu bienestar corporal.
Puedes evitar la retención de líquidos si sigues estas pautas. Movimiento, nutrición e hidratación. Verás cómo se reduce ese malestar.
También puedes considerar la suplementación natural, como cola de caballo o alcachofa por su efecto diurético suave. Ojo: si tienes alguna patología digestiva evita la alcachofa, puede resultar irritante.
Recuerda: mantener un equilibrio hídrico es fundamental.
Controlar la entrada y salida de agua en tu cuerpo es clave para no sobrecargar los riñones ni alterar el balance mineral.
Cualquier consulta o necesidad, te acompaño.