Desde la cuidada selección de sus artistas hasta el ambiente íntimo, conoce de la mano de su Director Artístico, Miguel Ortiz, el Tablao Flamenco de Sevilla.

¿Cuánto tiempo lleva en funcionamiento el Tablao Flamenco?

Bajo la marca Tablao Flamenco de Sevilla, llevamos funcionando apenas 8 meses, aunque, nuestra experiencia, va mucho más allá, pues tanto nosotros como el resto de personas que componen nuestra entidad cuentan con muchos años de trabajo en diferentes tablaos, tanto en Sevilla como en el resto de España.

¿Cómo surgió?

Se dieron el momento y las condiciones adecuadas para realizar un proyecto en el que pudiéramos sacar partido de nuestros recursos, nuestras experiencias anteriores y sobre todo de nuestra experiencia profesional y artística. En pocos meses sacamos nuestra idea adelante de forma satisfactoria.

¿En qué consiste el espectáculo?

Realizamos un espectáculo tradicional, respetando las bases originales del cante, el baile y la guitarra. A lo largo de la actuación, cada una de las tres vertientes tiene su momento de protagonismo; siendo el baile el que siempre crea más expectación.

¿Qué hace que su tablao sea diferente de otros tablaos flamencos?

Sin duda la calidad. Nos hemos preocupado de que todos los artistas sean de primer nivel; y de que los visitantes puedan ver la actuación desde muy cerca en un entorno íntimo, creando una experiencia inmersiva e incluso, en ocasiones, participativa; pues, además, son muchos los artistas flamencos que vienen a visitarnos como público.

¿Qué días se puede disfrutar?

Abrimos todos los días del año sin excepción. Nuestras instalaciones están, además, climatizadas; lo que hace que la visita sea aún más agradable en cualquier época del año.

¿Los artistas van cambiando?

Sí, constantemente. Uno de nuestros valores añadidos es la gran variedad de la que disponemos en el escenario; lo que nos permite ofrecer diferentes estilos de actuación, siempre sin salirnos del concepto de flamenco tradicional.

¿Cómo selecciona a los artistas?

Nuestro proceso de selección es bastante exigente. Las personas que están en nuestras tablas no sólo deben tener un nivel artístico excepcional; sino que, además, deben tener una calidad humana sobresaliente, acorde al resto del equipo. Esto, que no es nada fácil, es lo que consigue que seamos una pequeña gran familia flamenca y que todos se complementen trabajando en equipo en el escenario.

Muchas veces este tipo de espectáculos pensamos que están más enfocados a los turistas que a los propios sevillanos, ¿es así?

Nada más lejos de la realidad. Hemos adelantado que ofrecemos un espectáculo de la más alta calidad gracias a los artistas de renombre que lo hacen posible. Lo mejor de lo mejor. Y esto, no es para que lo disfruten las personas que vienen de fuera; es para que lo disfruten todos, empezando por los sevillanos. De hecho, entre nuestro público suelen haber bastantes locales, ya que, además, ofrecemos una tarifa muy reducida para los locales.

Además del espectáculo se puede disfrutar de diferentes tapas típicas de nuestra tierra ¿no?

Lo principal para nosotros es sin duda la actuación. No obstante, para ofrecer un complemento que permita que nuestros visitantes puedan tener una mayor comodidad y una experiencia más agradable, tenemos una bodega cuidadosamente seleccionada, que podemos acompañar con chacinas y quesos de nuestra tierra.

¿Cómo esperas que evolucione el mundo del flamenco en los próximos años?

Bajo mi punto de vista, la mejor evolución que podría ocurrir en el flamenco sería la implementación definitiva en el sistema educativo, al menos en Andalucía. No debería ser normal que los niños andaluces puedan hablar sobre autores e intérpretes clásicos alemanes o austríacos, por poner un ejemplo, y no sólo no sepan nada de la rica cultura que les rodea, sino que, además, la tengan como una gracia, como fruto de la gran ignorancia actual en la materia. Enseñar las bases a los niños de su propia cultura es lo que puede despertar un interés en ellos suficiente para que posteriormente sigan estudiándolo y practicándolo; llegando a más personas, creando más afición y respeto; de lo que también saldrían nuevos profesionales que, quizá, enriquecerían aún más nuestro arte.

¿Qué consejos le darías a alguien que quiere aprender flamenco?

Constancia, es lo más importante. Llegues donde llegues, y tengas la experiencia que tengas, el arte flamenco es algo realmente ilimitado; nunca se termina de aprender.