Entrevista a Enrique Diaz Sánchez, director de Promove Fisioterapia
Tras treinta años de experiencia en el mundo de la fisioterapia, ¿puedes hablarnos de los cambios que has vivido en esta profesión en cuanto a técnicas y evidencia científica?
Terminé mi diplomatura de fisioterapia en la Universidad de Sevilla en el año 94, ya ha llovido mucho desde entonces y los cambios han sido evidentes pero graduales. Al principio contábamos con muchas técnicas basadas en terapia manual y la instrumentación que venía sobretodo de la parte de la electroterapia, de hecho, las formaciones de posgrado iban entorno a esto. Con el paso de los años se han ido perfeccionando y sumando nuevas técnicas de terapia manual basadas en la evidencia científica y clínica, además del uso de tecnología que facilita nuestra labor terapéutica y diagnóstica. A esto hay que añadir la gran cantidad de áreas de conocimiento y de intervención que tenemos a día de hoy los fisioterapeutas.
Aunque la fisioterapia sea un concepto muy global existen muchas formas de abordarla en consulta. ¿Es muy distinta la fisioterapia que se realiza en diferentes centros aún tratando la misma patología?
Puede parecer que una misma lesión se aborda desde la fisioterapia con la misma metodología pero esto es del todo erróneo. Existen tantas “fisioterapias” como profesionales, incluso cada profesional va cambiando su forma de trabajar y con esto el uso de distintas técnicas en función de su reciclaje en formación, experiencia, etc.
Podría decirte incluso que el propio carácter del fisioterapeuta hace que module su desarrollo profesional y utilice una técnicas u otras.
En los centros en los que se tratan a pacientes a través de seguros de salud privados ¿se atiende de la misma manera a los pacientes?
Por supuesto que no, y seguro que hay excepciones. Las mutuas suelen pagar por tratamiento en torno a 4 y 5 euros. Evidentemente no debemos atender a la persona en función de lo que nos pagan y en cualquier caso el paciente debe de llevarse el mejor tratamiento posible. Pero las empresas/consultas que asumen este tipo de trabajo para que al final le salgan las cuentas tienen que meter en la misma hora de tratamiento a 8 o 10 personas. Esto merma enormemente la calidad de la atención y el primer perjudicado en estos casos es el paciente.
¿Esto perjudica a los profesionales de la fisioterapia?
Nos perjudica muchísimo. Cuando un paciente acude a una terapia de este tipo puede incluso hasta entender que esta es la única forma de fisioterapia que existe y con ello hace que nuestra profesión pierda valor. Mi colegio profesional, el de la fisioterapia andaluza, está muy sensibilizado con esto y está por la labor de que el fisioterapeuta reciba unos honorarios dignos, y con ello, que los tratamientos sean de calidad. Tengo la fortuna de hacer consultas de una hora de duración y, cuando un paciente que ha acudido a sesiones de mutua, prueba con esto (más tiempo de atención y mayor calidad), es consciente de la gran diferencia. Esto si que nos hace más valiosos a los fisioterapeutas.
Siendo un fisioterapeuta que ha trabajado en distintos sitios y con distintas patologías ¿cómo definirías el tipo de fisioterapia que haces?
Si tuviera que definirme con unas palabras diría que soy un fisioterapeuta “psicosomático”. Entiendo que la persona que acude a consulta lo hace con su lesión y con sus circunstancias y estas a veces pesan más en su malestar o lesión. Hay una frase de Ortega y Gasset que repito mucho en mi día a día: “Yo soy yo y mi circunstancia” y añado: “…y si no la salvo a ella, no me salvo a mi”. Esto quiere decir que cuando una persona tiene una lesión, como terapeutas debemos de tratarla, pero debemos atender a los condicionantes en los que se desarrolla dicha lesión para que el tratamiento sea más rápido, más eficaz y que el paciente sea consciente de todo esto y se haga “poderoso” en proceso terapéutico.
¿Cuál es el motivo principal o más frecuente de consulta en fisioterapia?
El dolor es el síntoma más frecuente en consulta. Pero debemos de tener en cuenta que el dolor no es más que un proceso de nuestra mente en base a un daño real en los tejidos reales (o incluso potencial, en ocasiones no existe tal daño). La terapia que sólo intenta paliar el dolor es una terapia con unas miras muy cortas ya que no atiende a las posibles causas y a las soluciones adecuadas. Un buen fisioterapeuta no se centra en el dolor sino en mejorar la funcionalidad de los tejidos, su movilidad, la circulación, los procesos neurológicos… el dolor no tiene razón de ser cuando se aborda de forma integra la problemática.
A la hora de hacer un diagnóstico y llevar a cabo un tratamiento, actualmente ¿podéis ser más precisos haciendo uso de la tecnología?
La tecnología nos ayuda muchísimo a hacer una valoraciones más precisas y unos tratamientos más finos y menos invasivos, esto es indudable. Pero a veces podemos caer en demasía en la tecnificación de nuestro trabajo. Podría decirte que existen estudios científicos que constatan que una buena exploración en consulta para problemas de hombro dan hasta incluso más información que una RMN o TAC. Con esto no quiero decir que haya que hacer menos pruebas de imagen pero si hay que explorar más y mejor y sobretodo, escuchar al paciente. Un buen interrogatorio en consulta en ocasiones nos da las claves sobre el tratamiento y la atención dirigida a esa persona.
¿Influye en cualquier lesión el estado emocional de un paciente?
Claro que sí. La persona que afronta un proceso de recuperación con ánimo y con una actitud positiva no solamente se recupera antes sino también mejor. Esto además hace que el paciente viva este proceso de una forma mucho más consciente y agradable. Y dado que el estado emocional influye en esto debemos de apoyarnos en otros profesionales, los psicólogos, cuando realmente esto supone una dificultad clara en la recuperación. Los fisioterapeutas no somos psicólogos pero también hacemos abordajes en este sentido y utilizamos técnicas también que mejoran a través del cuerpo esta faceta tan importante de la persona.
Hay un trabajo especial que se hace en consulta, la modulación del sistema nervioso del paciente ¿en qué consiste?
En consulta utilizamos la tecnología NESA de Neuromodulación no invasiva y además, con muy buenos resultados. Con este trabajo se regula la actividad del sistema nervioso mediante microcorrientes (estímulos eléctricos imperceptibles). Esto ayuda a modular la actividad neuronal que en muchas ocasiones está alterada. El ritmo de vida, la aceleración constante, las exigencias tan altas del entorno y las nuestras propias, la alimentación tan procesada, el sedentarismo… son constantes en nuestra sociedad y alteran nuestro equilibrio interior y el de nuestro sistema nervioso.
¿Para qué se utiliza?
Existen varias patologías en los que la tecnología NESA es muy efectiva: entre ellas esta el insomnio, el estrés y la ansiedad, el cansancio persistente, la vejiga hiperactiva y dolor crónico. Es especialmente interesante en fibromialgia, dado que en esta patología ocurren varios de los condicionantes anteriores. Pero en esto también hay que hacer una evaluación en consulta y la utilización de registros y cuestionarios nos aportan una información muy útil para ver la situación inicial del paciente.
Dada tu amplia experiencia ¿qué aspectos o cualidades resaltarías en un fisioterapeuta o en cualquier profesional de la salud?
Lo más importante sería que cualquier profesional de la salud tuviera una actitud empática con respecto al paciente: esto es saber escuchar y conectar con la persona, y, además, debe saber comunicar de forma clara y comprensible. A esta actitud debemos añadirle la aptitud: el conocimiento, para poder entender el porqué de la lesión y ofrecerle la mejor alternativa terapéutica. Y si en estas cualidades hay además experiencia, tenemos al profesional no perfecto, esto no existe, pero si al profesional que va a conseguir lo máximo en la terapia y va a implicar al paciente en este proceso… esto viene a ser “éxito garantizado”.