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Desde los tres años, Yeray Ruiz sintió la pasión por el motociclismo y, con esfuerzo y determinación, ha conseguido cumplir su sueño de competir al más alto nivel. Con el respaldo de su familia y su equipo, el piloto malagueño se prepara para una temporada decisiva con un objetivo claro: ganar el Mundial Junior en Moto2.
Yeray, ¿cómo empezó tu pasión por el motociclismo y a qué edad supiste que querías ser piloto profesional?
Empecé con 3 años en el garaje de nuestra casa junto a mi padre, que era un apasionado de las motos y me compró una eléctrica. Me encantaba coger la moto. A los 6 años, la edad mínima para competir, comencé a participar en carreras. Gané el Campeonato Madrileño y fui subcampeón de Andalucía en mi primer año. A esa edad, no pensaba en ser piloto profesional, solo disfrutaba encima de la moto. Con 13 años fui campeón de España de Moto5 y de la Cuna de Campeones. Fue ahí cuando vi que todo era más profesional y me di cuenta de que realmente podía llegar a ser un buen piloto.
¿Qué recuerdas de tus primeros pasos en este mundo?
Recuerdo estar en el colegio pensando todo el tiempo en llegar a casa para poder entrenar con la moto. Mi familia siempre me apoyó, viniendo a mis carreras, y sobre todo mi padre, que me llevaba a cada entrenamiento, a cada carrera y preparaba las motos.
De tu trayectoria, ¿cuál ha sido el logro más significativo para ti y por qué?
Para mí, mi logro más significativo fue mi debut en el Mundial de MotoGP en la categoría de Moto2. Es el sueño de todo niño llegar hasta ahí, y yo puedo decir que lo he cumplido corriendo dos carreras. Otro logro importante fue cuando me hice campeón de España en Supersport 600 en mi primer año en la categoría. Venía de una categoría con una moto muy diferente y la adaptación no fue fácil.
Ser piloto requiere mucho más que habilidad encima de la moto. ¿Cómo es tu rutina de entrenamiento físico y mental para competir al más alto nivel?
No basta con tener talento sobre la moto, hace falta mucho trabajo y sacrificio. Tengo la suerte de contar con mi entrenador, Ernesto, que me planifica y supervisa los entrenamientos. No solo es mi entrenador, también tengo mucha confianza en él y en muchas ocasiones hace de psicólogo.
Mi rutina semanal consiste en entrenar de lunes a viernes dos veces al día, mañana y tarde. Por las mañanas hacemos carrera o bicicleta para el trabajo cardiovascular, y por las tardes entreno en el gimnasio con mi entrenador. Dependiendo del plan, trabajamos fuerza, entrenamientos específicos para la moto o ejercicios funcionales.
Los fines de semana suelo entrenar un día con la moto y descansar completamente el otro. También voy una vez a la semana al fisioterapeuta (Manuel Cuenca Fisioterapia) para descargar los músculos y estar al 100% en los entrenamientos. Todo esto, combinado con sesiones en Motoschool Málaga y entrenamientos en circuito con motos de velocidad y motocross, conforma un plan muy completo.
¿Qué metas te has marcado para esta temporada y cómo te estás preparando para alcanzarlas?
Este año tengo un objetivo muy claro: ser campeón del Mundial Junior en Moto2 y subir el año que viene al Mundial. Me siento más preparado física y mentalmente que nunca. Mi equipo de trabajo y yo estamos haciendo una gran pretemporada para llegar muy fuertes a la primera carrera.
¿Cuál es el circuito en el que tienes mayor interés en destacar este año?
En todos hay que destacar y estar delante. Al final, un campeonato no se gana en una sola carrera, hay que ser constante y sumar el máximo de puntos posibles en cada prueba.
Pero si tengo que elegir un circuito, sería el de Jerez. Le tengo un cariño especial porque es la carrera de casa, en Andalucía, donde mi familia, amigos y mi club de fans vienen a apoyarme. Me siento muy arropado y motivado corriendo allí.
A largo plazo, ¿qué objetivos te gustaría alcanzar en tu carrera como piloto profesional?
El objetivo es poder competir en la categoría reina: MotoGP. Hay que seguir trabajando duro y cumpliendo pequeñas metas que nos acerquen cada vez más a ese sueño.
¿Hay algún campeonato o categoría en la que sueñes competir?
MotoGP.
¿Tienes algún piloto que te inspire y motive en tu carrera?
De pequeño me encantaba Dani Pedrosa, pero desde que apareció Marc Márquez, sin duda, se convirtió en mi referente. Tiene un pilotaje espectacular y siempre saca el máximo rendimiento a cualquier moto que le den.
¿Qué valores o aprendizajes has tomado de ellos para aplicarlos en tu día a día como piloto?
De Marc Márquez he aprendido a luchar siempre, pase lo que pase. La perseverancia y la resiliencia son claves: a pesar de las lesiones y los retos físicos que ha enfrentado, siempre vuelve con una mentalidad de lucha, demostrando una increíble capacidad para superar la adversidad. También destaco su capacidad de adaptación, su confianza en sí mismo y su valentía.
Eres un joven talento de Málaga. ¿Qué significa para ti representar a tu ciudad en las competiciones?
Para mí, es un orgullo representar a Rincón de la Victoria y Málaga por todo el mundo. Además, es muy especial saber que la gente que siempre me ha apoyado desde que empecé se siente parte de mis logros, celebrando cada paso en mi carrera.
¿Cómo ha sido el apoyo de tu familia, amigos y la comunidad malagueña en tu trayectoria?
Sinceramente, sin el apoyo de mi familia no habría llegado hasta aquí. Se han sacrificado muchísimo, especialmente mi padre, que ha estado a mi lado en cada paso del camino, llevándome a todas las carreras y trabajando incansablemente para que pudiera cumplir mi sueño.
Mis amigos también han sido fundamentales. Han estado ahí para apoyarme en los momentos buenos y en los más complicados, celebrando mis logros como si fueran propios y motivándome a seguir adelante cuando las cosas se ponían difíciles.
Además, la comunidad malagueña ha sido un pilar muy importante. Desde mensajes de ánimo hasta personas que, sin apenas conocerme, me han mostrado su apoyo. Saber que hay gente que se siente orgullosa de que alguien de Málaga esté luchando por su sueño en un escenario tan grande me da una fuerza increíble para seguir trabajando.
¿Qué consejo le darías a los jóvenes que sueñan con dedicarse profesionalmente al motociclismo?
Que disfruten encima de la moto, que se sacrifiquen y que aprendan de cada piloto.
¿Cuál ha sido la lección más importante que has aprendido durante tu carrera hasta ahora?
Que en este deporte hay muchos altibajos. Siempre habrá momentos difíciles, pero hay que seguir luchando. Eso es lo que te hace más fuerte si no te rindes. Además, he aprendido a valorar cada pequeño logro, porque en motociclismo no tienes nada garantizado.
¿Qué te gustaría decirles a tus seguidores y a quienes te apoyan en esta emocionante aventura?
Que estoy muy agradecido por todo el apoyo que me dan día a día. Espero que este año nos traiga muchas alegrías y emociones.
Si pudieras resumir tu filosofía como piloto en una frase, ¿cuál sería y por qué?
Mi filosofía como piloto se basa en el trabajo constante, la disciplina y la pasión por el motociclismo. Cada carrera es una oportunidad para aprender, crecer y dar lo mejor de mí. Mi objetivo no es solo ganar, sino también inspirar a quienes, como yo, persiguen sus sueños con esfuerzo y determinación.