Con el artículo de este mes, seguimos ahondando en la importancia de garantizar la seguridad de nuestra información personal y profesional. Concretamente, nos centraremos en la privacidad de los datos que compartimos con terceros a través de nuestros diferentes dispositivos y aplicaciones.
El uso de varios dispositivos móviles por parte de una misma persona es algo tan habitual, como lo es el hecho de almacenar información personal en los mismos, ya sean móviles, tablets o portátiles. Fotografías, emails, contactos, documentos, información recogida por las cookies del navegador, una cuenta bancaria utilizada para comprar online, o la instalación de apps de terceros, convierten a nuestros dispositivos, no solo en un almacén de información privada, sino también en el punto más vulnerable para nuestra privacidad.
Recientemente, entidades como La Liga Española de fútbol ha admitido que a través de su APP, utiliza el micrófono y ubicación del teléfono de los usuarios para controlar a los bares que emiten partidos de fútbol sin pagar las licencias correspondientes.
Este hecho, aunque ha sido castigado por la AGPD con una multa de 250.000€ por falta de transparencia, al no estar claramente especificado este uso en sus condiciones de privacidad, es una práctica habitual por parte de los fabricantes de aplicaciones para recopilar nuestra información y hacer usos comerciales de la misma.
El libre acceso que se facilita a las APPs cuando aceptamos su instalación, puede poner en grave riesgo nuestra privacidad.
Dada la relevancia de este hecho, a continuación vamos a facilitar algunas claves que permitan de algún modo, mejorar la seguridad de la privacidad de los usuarios, para que su información no sea utilizada por terceros sin su consentimiento expreso:
1.Elige un fabricante de teléfono confiable: El mercado actual de dispositivos móviles, se encuentra inundado de multitud de fabricantes que ofrecen dispositivos de todo tipo a precios muy competitivos, pero es muy recomendable informarse previamente si dicha marca, practica y demuestra una correcta filosofía de respeto al usuario. Decidirse por un fabricante de países en los que no se regula la privacidad con garantías, puede convertirse en el primer talón de Aquiles para la seguridad de nuestros datos.
- Nunca instales versiones de iOS y Android no oficiales: Esta práctica más común en dispositivos Android que en IOS, puede permitirnos contar con un Sistema Operativo que a priori, mejore el rendimiento y las prestaciones de nuestro dispositivo, pero es importante reseñar que utilizar una ROM desarrollada por un tercero y no por el equipo oficial de Google o Apple, puede acarrear gravísimas consecuencias para la privacidad del usuario, ya que el dispositivo puede estar recabando datos y enviándolos a terceros con total impunidad y sin que el usuario se percate de ello.
- Descarga APPs exclusivamente de sitios oficiales: La descarga de aplicaciones desde sitios no oficiales, puede provocar que nuestros datos se vuelvan 100% vulnerables, ya que no contamos con ningún tipo de garantía de que esas aplicaciones cumplan la mas mínimas de las normas de privacidad.
Por ello, es importante recomendar a los usuarios que descarguen siempre aplicaciones desde el App Store o el Play Store; ya que aunque este hecho no satisfaga totalmente nuestras necesidades de privacidad, al menos nos permite contar con la tranquilidad de que sus términos no serán abusivos.
- Revisa detenidamente, los accesos requeridos para el uso de una app: Cuando instalamos una APP en nuestros dispositivos, siempre se solicita al usuario permisos para acceder a cierta información del teléfono como puede ser los contactos, la galería fotográfica, uso de la cámara, etc.
El acceso a estas informaciones suele ser necesario para el normal uso de la aplicación, pero a veces las aplicaciones solicitan acceso a informaciones que no son indispensables para su funcionamiento y es en este punto, donde debemos poner máxima atención para autorizar exclusivamente los accesos indispensables.
Si observas que una aplicación solicita el acceso a elementos del teléfono que no tienen un sentido lógico para su funcionamiento, la mejor opción es descartarla y buscar aplicaciones que ofrezcan servicios y funcionalidades similares.
También es una buena práctica, revisar las condiciones de privacidad de las APPs que ya tenemos instaladas en nuestros dispositivos, y gestionar los accesos que les hemos otorgado.
- Elimina las aplicaciones que no utilizas: Otra buena recomendación es la de llevar a cabo una revisión periódica de todas las aplicaciones que tenemos instaladas en nuestro dispositivo, y eliminar todas aquellas que no estemos utilizando, borrando toda la información que va quedando almacenada en la memoria del teléfono.
- Usa un “scanner” de aplicaciones: Como última clave para mejorar nuestra privacidad, está la instalación y uso de algunas aplicaciones tipo “scanner”, que nos permitan analizar y evaluar la forma en la que; las aplicaciones instaladas en el teléfono y las nuevas que se puedan descargar, respetan la privacidad del usuario; permitiendo de este modo, tener una visión más clara y precisa sobre los riesgos que corremos al usar cada una de las APPS.
Por citar alguna, la aplicación “WeRulebyPrivacyCloiud” es una buena opción para este fin.