Cuando tocan disfrutar de las vacaciones en el mes de septiembre, a priori, puede resultar como el peor turno de todos. Pero no tiene el porqué ser así, sino todo lo contrario, es un mes ideal para disfrutar de las tan merecidas vacaciones y descansar de verdad.
Si hay que sacarle un inconveniente, puede que sea la disponibilidad para aquellas familias que tengan niños por el tema de los colegios, que desde hace algunos años ya no comienzan a mediados del mes, sino que lo suelen hacer sobre el día 10 de septiembre. Pero aún así se puede disfrutar de una semana un poco más larga. Simplemente hay que darle la vuelta a la tortilla y ver el lado positivo de las cosas. Y de eso vamos a hablar. De las ventajas que tiene el veranear en septiembre.
Es un mes en el que aún sigue haciendo calor, pero un calor más moderado, más llevadero. Las tardes aunque se acortan un poco, aún así siguen siendo largas. Por lo que se puede seguir disfrutando de la playa.
Otra ventaja y puede ser la más importante de todas, es que es un mes más barato. Puede llegar ahorrar casi un 50% con respecto al mes de agosto, escogiendo el mismo destino. Además, de encontrar muchas promociones como el 2×1. Por lo tanto, si el presupuesto no es muy abultado, este es el mejor mes para viajar, con buen tiempo y disfrutando de unos precios más bajos.
Aunque la ventaja anterior, puede resultar ser una de las mejores, también es bastante atractivo, sobre todo para los amantes de la tranquilidad, que en septiembre no hay aglomeraciones. Ni aglomeraciones ni hacer colas en los hoteles a la hora de entrar en el comedor, o cuando se va a un restaurante o bar y esperar para poder coger mesa. El estrés se va por completo, no hay que levantarse temprano para poder coger tumbona en la piscina del hotel o incluso plantar la sombrilla en primera línea de playa.
Y ya para más Inri, hay mejor disponibilidad a la hora de escoger destino, en cuanto a fechas para reservas de hotel o billetes de avión. Una vez tenida todas estas ventajas en cuenta, hay que saber escoger bien el destino y leer bien la letra pequeña de todas las ofertas que se planteen.
Si se escoge lugares de playa, lo mejor es costa mediterránea, ya sea la española como las Islas Baleares o la Costa del Sol, o si se sale al extranjero, las playas de Croacia, Sicilia, Chipre. O bien la Costa de la Luz de Huelva o la Bahía de Cádiz; el Algarve portugués. Los destinos menos recomendables de playa para este mes son los del Caribe porque suele ser época de huracanes.
Si por el contrario, en vez de playa, la intención es conocer lugares, es momento ideal para hacer turismo cultural. La provincia de Sevilla tiene muchísimos municipios que están cargados de historia y de leyendas. Al igual que el resto de España, se pueden visitar ciudades históricas o del norte, aprovechando el buen tiempo. Lo mismo que si se decide salir al extranjero. Es un buen momento para visitar la Gran Manzana o ciudades europeas y si se hace en familia dedicar un día a visitar algún parque de atracciones.
En cuanto a destinos hay miles, piensa que cuando todos vuelven de vacaciones, tú te vas. Que has trabajado un mes de agosto, donde en la mayoría de las empresas hay mejores horarios y los días son más tranquilos. Y que el tan temido síndrome postvacacional no lo vas a notar. Sea como fuese, salgas de viaje o no descansa y desconecta.