
Semana Santa 2025: incertidumbre en la hostelería sevillana ante la amenaza de lluvia
La hostelería de Sevilla se enfrenta este año, por segundo consecutivo, a una Semana Santa marcada por la incertidumbre. La inestabilidad meteorológica impide hacer previsiones económicas realistas, lo que genera preocupación entre bares y restaurantes de la ciudad.
Ya en 2024, las lluvias provocaron una caída de entre el 50% y el 70% en la facturación del sector, en función del tipo y tamaño de los establecimientos. A pesar de ello, el sector mantiene el optimismo y trabaja en los preparativos previos para atender al público durante los días grandes de la ciudad. Refuerzos de personal, aprovisionamiento de mercancía y planificación logística son algunas de las medidas que ya se están aplicando.
Apoyo institucional y nueva etapa para la Madrugá
Desde la Asociación de Hosteleros de Sevilla y Provincia, se ha valorado de forma positiva el cambio de postura del Ayuntamiento, que este año ha descriminalizado al sector en relación con su actividad durante la Madrugá. “Nuestros establecimientos no son un problema, sino una solución”, aseguran desde la entidad. Esta nueva etapa se interpreta como un reconocimiento a la labor de la hostelería como agente fundamental para la convivencia y el desarrollo económico durante la Semana Santa.
Un sector preparado y responsable
El sector hostelero sevillano insiste en su compromiso con la seguridad, la responsabilidad y el respeto por las normas que exige un evento multitudinario como la Semana Santa. Desde la asociación se recuerda que Sevilla ha demostrado en numerosas ocasiones su capacidad para gestionar grandes eventos, y confían en que este año vuelva a estar a la altura.
«Nuestros bares y restaurantes están listos para dar el mejor servicio en unos días tan señalados para la ciudad. La responsabilidad de empresarios y público será clave para que, pese a la incertidumbre, vivamos una Semana Santa memorable», concluyen desde la organización.