Conforme se acerca el verano y el calorcito comienza a apretar, se vuelve más apetecible tomar refrescos bien fresquitos.
Para quien esté interesado en mejorar sus hábitos de alimentación y hacerlos más saludables, siempre viene bien recordar por qué motivos hay que dejar de aumentar el consumo de refrescos con azúcar y los sin azúcar, intentando buscar otras alternativas más saludables:
Si deja de tomar refrescos azucarados, obtendremos los siguientes beneficios:
-Reducir el riesgo de padecer sobrepeso y obesidad, junto a otras enfermedades relacionadas.
-No se alterará el umbral del sabor
Se reducen las posibilidades de padecer osteoporosis.
-No tendrás caries.
-No tendrás más hambre.
Con respecto a los refrescos sin azúcar, ya sabemos que no es la mejor alternativa, pues igualmente, si se toman a diario, pueden alterar el paladar y puede influir en el peso. Por eso, los nutricionistas solemos recomendarlas también dentro del grupo de bebidas de consumo ocasional.
Siempre existen opciones más saludables, igual de fresquitas y con la misma sensación de “bebida gaseosa” para tomar diariamente y acompañar nuestros platos más veraniegos.
Os dejo a continuación dos recetas muy sencillas de bebidas caseras que os sorprenderán:
REFRESCO DE PEPINO Y CÍTRICOS.
-Ingredientes: agua con gas, pepino, limón, lima y kiwi, cilantro.
-Elaboración: prepara los cubitos de hielo con las hojas de cilantro. Corta el pepino, el kiwi, la lima y el limón en rodajas. Añade los cubitos de hielo y por último el agua con gas.
REFRESCO DE NARANJA
-Ingredientes: agua con gas, naranja.
-Elaboración: corta la naranja en trozos pequeños o rodajas finas. Llena un vaso ancho, el más ancho que tengas, con bastante hielo y todas las rodajas o trozos de naranjas que puedas. Añade el agua con gas muy fría y disfruta de las burbujas.