En estos momentos tan complicados las marcas buscan más que nunca conectar con el público, con su target. Se trata de conseguir ventas seguras.
Para ello, hay que crear campañas eficaces y ello sólo se consigue conectando con el público. En los últimos días hemos tenido un ejemplo de que hay campañas que no funcionan. Me refiero, por ejemplo, a la campaña de Vuelta al Cole de El Corte Inglés, en la que se ve un niño saltando de una silla, pero para el público parecía que era un alegato al suicidio infantil. Finalmente, fue retirada.
Ya me habréis leído sobre varios conceptos básicos sobre marketing y comunicación, pero hoy quiero incidir de nuevo, en lo principal de una campaña: el engagement o conexión con tu público.
Vamos a ir por partes y vamos a analizar todo lo que hay que tener en cuenta.
Quién es tu público
Parece lo más tonto del mundo, pero no. En ocasiones, las empresas se olvidan de a quién va dirigido sus servicios o productos, no es lo mismo vender unas zapatillas que un plan de pensiones. Lo primero que hay que definir es el perfil de sus posibles clientes. Y con definición nos referimos a las variables de edad, sexo, nivel socioeconómico, etc. Debemos realizar una auténtica radiografía del target. Cuanto más sepamos, más concreta será la campaña.
En esta definición se basa tanto Facebook Ads como Google Ads, que te permite segmentar con numerosas variables.
Qué idioma habla tu público
Por idioma no nos referimos a si habla español o chino, sino más bien cuáles son sus intereses, nivel educativo, nivel de conocimientos, horarios, etc. Esta quizás es la parte más importante del proceso. Si nuestro público es un gran empresario, sabemos que su nivel adquisitivo es más alto, pero si queremos llegar a un público adolescente, obviamente, nuestro mensaje debe estar ligado a su mundo tecnológico, a su argot, a lo que le interesa.
Pero no sólo nos referimos a las condiciones del público, sino también al mensaje. Un ejemplo de ello es Netflix. Su púbico mayoritario está definido por su consumo de contenidos audiovisuales. La compañía ha sabido conectar a través de las múltiples referencias a la cultura pop en la que se ha criado su audiencia potencial. Por ello, su lenguaje está adaptado a ese nivel sociocultural de su público, lo que ha conseguido un alto índice de engagement.
Coyuntura y estereotipos
Una parte esencial. Hay que también estudiar en qué contexto vive tu público, no es lo mismo realizar una campaña en España que en China o en Afganistán, hay muchos ejemplos de campañas fracasadas porque sus creadores no tuvieron en cuenta el contexto. Hay que estudiar cuál es el ‘medio ambiente’ del potencial cliente. Ello unido al nivel social del mismo, es decir, alusiones al machismo, a la homofobia, que denigren a minorías étnicas u otros colectivos, ya que hoy son inadmisibles para la población. Algunas marcas no tuvieron en cuenta esto y sus campañas se estrellaron. No debes olvidar que las marcas ya no venden productos, sino sensaciones, experiencias o sentimientos.
Cómo llego al público
Una vez que tenemos determinado el público, así como sus intereses, podemos crear el mensaje. Lo que vamos a transmitir, los conceptos que queremos hacer llegar a ese público para que nos contraten o nos compren.
Lo siguiente es cómo llegar a ellos. En este punto, hay que hacer una apreciación fundamental. En todo momento me he referido a campaña, pero con ello, no me refiero exclusivamente a un anuncio. Quizás, durante el estudio de tu público te has percatado que lo necesario no es un anuncio, sino un evento, un patrocinio, una landing page, una app, un perfil en redes sociales, crear vídeos, actividad de marketing directo, etc. Con campaña nos referimos a las acciones necesarias para conectar con nuestro público y que consigamos que nos contraten.
Dependiendo del público, del mensaje y de la acción a desarrollar, debemos seleccionar determinadas plataformas acordes con ellos, ya sean offline (televisión, radio, periódicos, vallas, etc) u online.
Feed Back
Es una parte al igual de importante que la elección de los intereses. Nuestro trabajo no finaliza con el desarrollo de la acción, sino que tenemos estar pendientes de todo lo que se comenta sobre ella. Hoy en día, gracias a las redes sociales e internet lo tenemos fácil, puesto que podemos recoger muchísima información sobre nuestra campaña. Si vemos que la acogida ha sido negativa, podemos reaccionar pronto y minimizar los daños.
Crear una campaña no es fácil, requiere de muchas horas y de un trabajo de exploración previo, incluso sociológico. Muchas campañas han fracasado porque no san sabido conectar con este público. Por ello, como siempre digo, confía en los profesionales de la comunicación para que tu empresa sepa conectar con sus clientes.