Como ya sabrás el 14 de febrero se celebra San Valentín y aunque este es un día que normalmente está reservado a las parejas cuando tienes hij@s, especialmente si son pequeños las reglas cambian y puedes aprovechar para celebrar el amor a lo grande y por todo lo alto e incluir a tu hijo o hija en la celebración.     
Si tu hij@ es pequeñ@ seguramente no sepa qué es San Valentín o porqué se celebra, pero puedes explicarle que este es un día que conmemora a un santo que representa a l@s enamorad@s y que vosotr@s por ser una familia que se quiere, queréis celebrar vuestro amor.                   
De este modo, puedes proponerle que para celebrar San Valentín vais hacer distintas manualidades como crear corazones de papel o una bonita tarjeta para el Día de los Enamorados en la que tod@s podéis escribir porqué os gusta tanto vuestra familia. Es una manera divertida de poder expresaros lo mucho que os queréis y lo importantes que sois l@s un@s para l@s otr@s. 

Además, es una magnífica oportunidad para aprender nuevas formas de expresar los sentimientos, así como de practicar la ortografía y la gramática. 

También podéis decorar junt@s la casa con globos, corazones, guirnaldas… Para hacerles más participes a la vez que enseñarles el valor de reciclar os invito a que le planteéis que él o ella es la encargada de diseñar la decoración y que para ello tiene que utilizar objetos o materiales que ya tengáis en casa o reutilizar los adornos de navidad, etc..,.  

 
Otra alternativa es ver alguna peli romántica como La Dama y el Vagabundo o hacer algún menú especial como una tarta con forma de corazón o preparar recetas sencillas, pero servirlas de manera especial o decorar la mesa con flores y velas… Esta comida especial no tiene que ser una cena, sino que podéis hacerla a la hora del desayuno, del almuerzo o de la merienda o en cualquier otro momento o forma en la que se os ocurra. 

Para los más mayores, además de lo anterior, podéis contarles historias de amor que hayan sido famosas y que seguramente no conocen, como la de Cleopatra y Marco Antonio o la de Shah Jahan y Mumtaz Mahal que dio como resultado la creación del impresionante Taj Mahal en la India.

 
También le puedes explicar cómo se conocieron y enamoraron papá y mamá o pedirle que él o ella explique qué entiende por amor y como le gustaría poder vivir San Valentín cuando sea mayor.

Asimismo, es un buen momento para reflexionar que no hay que elegir entre un amor u otro, sino que podemos querer a muchas y diferentes personas a la vez. Así, cuando somos pequeñ@s nuestro amor es principalmente para nuestra familia cercana (mamá, papá, herman@s, prim@s, abuel@s, ti@s) pero que conforme vamos creciendo vamos ampliando a las personas que amamos como, por ejemplo, nuestros amigos y amigas y llega un momento en que nos enamoramos por primera vez y entonces esa persona pasa a ser el centro de nuestro universo. Pero esto no significa que dejamos de querer a l@s demás porque en nuestro corazón siempre hay hueco para seguir queriendo a más personas como cuando tenemos hij@s, sobrin@s…  Y que por eso no hay que preguntar a quién se quiere más porque el amor es infinito y tiene muchas caras y maneras de demostrarlo. 

Feliz San Valentín y que nunca independientemente de la fecha que sea y de lo que se celebre nunca te olvides de demostrarle a las personas que quieres y en especial a tu hijo o hija lo mucho que le quieres. 

LA IMPORTANCIA DE LOS PRIMOS

Se suele hablar mucho de la importancia de l@s herman@s pero hay otra relación que también es muy importante, sobre todo si tu hij@ no tiene herman@s. Por eso quiero hablarte del vínculo entre primos y de cómo fomentarlo. 

Crecer junto a sus prim@s hace que tu hij@ establezca con ell@s una amistad muy especial y profunda que durará todas sus vidas, especialmente si tú te encargas de fomentarla. Asimismo, lo bueno de l@s prim@s es que aunque forman parte de tu familia viven en otra casa y tienen su propia familia por lo que no hay que disputarse la atención de mamá o papá porque cada uno o una tiene el suyo. Además, hay otras muchas razones como las que te detallo a continuación.   

Las 10 razones más importantes son:

1- L@s prim@s, además de familiares, son amigos, si están en su día a día mejor, pero en caso contrario también lo son aunque los encuentros sean esporádicos. 

2- Forman parte de los recuerdos de infancia de tu hij@, se instalan en su memoria y en su corazón y quedan ahí para siempre.

3- Los juegos, las aventuras, travesuras o secretos que tu hij@ comparta con sus prim@s hacen de esa parcela de su infancia algo inolvidable.

4- Tu hij@ aprende numerosos valores con sus prim@s: compartir, ser solidarios, perdonar…

5- Además esta relación ayuda a tu hij@ a entrenarse en el arte de la negociación y, sobre todo, a resolver conflictos.  

6- Si tú como progenitora o progenitor ayudas a establecer el vínculo entre prim@s, tendrán una relación para toda la vida.

7- En las reuniones familiares, son l@s mejores compañeros de juego y evita que tu hij@ se quede en un rincón aburrido o quejándose por lo que permite que l@s adult@s hablen tranquilamente.

8- Es muy posible que sean l@s primer@s mejores amig@s de tu hij@ y siempre permanezcan en sus pensamientos.

9- Aunque tu hij@ tenga vari@s prim@s, seguramente tenga una relación más cercana y de confianza con un@ de ell@s que normalmente es con quien más discute o más se pelea.

10- Comparten risas, bromas y gracias que puede que sólo ell@s entiendan, así es fácil verles muertos de risa por cosas que sólo ell@s comprenden.

Seguro que a ti se te ocurren muchas otras buenas razones y tengas una relación especial con algún primo o prima y sepas de la importancia de los primos y primas. Y si no es así, te recomiendo que hagas todo lo posible para que tu hijo o hija si la tenga. 

Pero cómo estimular el vínculo entre prim@s. Lo primero es fomentar los encuentros, es decir, intentar que se vean habitualmente y si no puede ser porque se vive lejos o por otras cuestiones intentar mantener el contacto por teléfono, videoconferencia… También podemos proponer o plantear escapada o quedadas para hacer un viaje, ir al cine, al parque… Y por último, otra manera es hablar con frecuencia sobre ell@s para que así mantengan vivo su recuerdo. Seguro que a ti se te ocurren muchas otras maneras o recuerdas cómo lo hacías en tu infancia.