Comienza la famosa “operación bikini” y gran parte de la población se embarca en la búsqueda de la pócima mágica que le haga perder esos kilos de más…
Tendemos así a restringir nuestra alimentación al máximo y a engancharnos a dietas específicas (“dieta detox”, “dieta con batidos sustitutivos de comidas”, “dieta del limón”…), provocando un descontrol en nuestra alimentación y funcionamiento de nuestro organismo.
En este post veremos cómo mejorar nuestro peso y composición corporal de cara al verano, sin pasar hambre, sin complicaciones ni gasto de dinero extra:
-Haz el número de comidas al día que necesites, siempre y cuando sientas que tu apetito y saciedad están controlados. Comer cada 3 o 4 horas suele ayudar a la mayoría de personas.
-Reduce el consumo de pan al desayuno, y que sea integral.
-Sustituye el picoteo de picos y embutidos por snacks saludables (dulces y salados): fruta, palitos de zanahoria, queso fresco, pepinillos, altramuces, pepino con sal, infusiones…
-Para meriendas y momentos más dulces, acude al chocolate >70%. Se le puede añadir a una macedonia de fruta, yogures, batidos caseros, helados caseros…
-Controla el consumo de alimentos ricos en grasas saludables (aguacate, aceite, frutos secos…).
-Come todas las verduras y hortalizas que quieras. Siempre deben estar presentes en las comidas principales. Serán la mejor opción por considerarse una fuente de vitaminas, minerales y fibra, con un alto poder saciante.
-Intenta evitar comprar productos ultraprocesados (bollería, dulces, precocinados, snacks salados…), si no los tienes en casa no los comerás, ni te acordarás de ellos.
-Bebe más líquido. Acompaña las comidas siempre con agua.
-Intenta identificar el hambre real (lo sentimos en el estómago) y el hambre emocional (realmente no sentimos hambre en el estómago, si no en la cabeza y siempre va asociado a una emoción: aburrimiento, tristeza, estrés…)
-Realiza actividad física de forma regular, cuanta más mejor. Andar 1 hora todos los días ya es más que nada. Muévete todo lo que puedas, es un factor clave.
-No te peses todos los días.
-No compenses unas comidas con otras.